viernes, 28 de febrero de 2014

The Monuments Men

Sinopsis: Segunda Guerra Mundial. Un grupo formado por directores de museo, artistas, arquitectos, curadores e historiadores de arte, entrados en años y fuera de forma, van al frente de batalla con la misión de rescatar las obras de arte más importantes del mundo, que están en manos de los Nazis. El singular grupo deberá poner sus vidas en riesgo para salvarlas y devolverlas a sus legítimos dueños.






Interpretes: Bill Murray, Cate Blanchett, George Clooney, Hugh Bonneville, Jean Dujardin, John Goodman, Matt Damon
Director: George Clooney
Guionista: George Clooney, Grant Heslov
Director de fotografía: Phedon Papamichael
Música: Alexandre Desplat
Montaje: Stephen Mirrione






Arte Para Todos


Películas sobre la segunda guerra mundial, el nazismo o la persecución de los judíos hay un montón; sobre las distintas circunstancias que dieron lugar durante este período nefasto también, pero la búsqueda que reunió a un grupo de hombres para recuperar las obras de arte robadas por los nazis y devolverlas a sus dueños originales, no recuerdo ninguna. Una historia muy atractiva, por demás potente y sumamente interesante para ver. ¿Habrá logrado el director (George Clooney, quien además es guionista) y una  suma de estrellas consagradas (Matt Damon, Bill Murray, Cate Blanchet, Jonh Goodman Jean Dujardin y… ¡George Clooney!, entre otros), con un presupuesto que parece no haber escatimado en gastos, para hacer de esta una realización genial y memorable? No. No lo lograron.

No crean que con esta previa les acabo de describir un bodrio imposible de ver porque no lo es. Yo pretendía ver un drama mechado con suspenso que haga honor al suceso histórico, pero por varios momentos pareciera que estuve mirando escenas de “Ocean Eleven”. Toda la trama es trabajada  a través de escenas por separado sin una correlatividad del guión que torne atrapante al relato, mezclado además con pequeños pasos de comedia realmente innecesarios. Parece al verla como que cada evento es independiente del otro, cada mini relato empieza y termina sin aportar suspenso (tengan en cuenta que las obras estaban escondidas en lugares no identificados, encima sabían que los nazis, ante la inminencia de la derrota,  iban a prender fuego y destruir todo por completo,  sumado que por el este venían los rusos queriendo apropiarse de estas obras de arte como trofeo de guerra del comunismo.  Todos los condimentos del suspenso al servicio del guionista). La correlatividad histórica hace agua. La batalla de Ardenes, por ejemplo, fue el último contraataque nazi con sus múltiples divisiones Panzer empujando a los aliados hacia el mar nuevamente, en una operación de pinzas de gran envergadura, donde casi lo logran, pero perdieron esta contra ofensiva porque los alemanes se quedaron sin nafta (literal) y Patton decidió tirarles con todo lo que tenía.  Aquí en la película este momento importante de la historia es solo una escena de festejo de navidad pseudo lacrimógena y listo. Todo es así. El gran carisma en escena de todos los protagonistas logra darnos una película entretenida pero no era lo que yo esperaba ver. Yo no esperaba una comedia. 

Sin tener en cuenta lo que yo anhelaba de lo que vi en realidad, la película está bien pero hasta ahí nomas. Les quiero aportar un dato muy importante si es que tienen pensado ir a verla al cine. Tengan en cuenta que desde el tráiler podemos ver las múltiples apariciones de George Clooney y Matt Damon entre otros. Esto parece ser un imán para nenas adolescentes que estarán poniendo sus risas desubicadas, ruidos de pochoclos y comentarios a viva voz molestando a la platea que quiere concentrarse en lo que está viendo. Dejen pasar un par de semanas para que el furor juvenil femenino se aplaque. Yo cometí el error de ir un día de estreno.  Mala mía.


Puntuación: 6 Favitos.-


miércoles, 26 de febrero de 2014

Dallas Buyers Club

Sinopsis: Basada en la vida real de Ron Woodroof, un hombre de texas que trabajaba como cowboy en los típicos rodeos y con una adicción a las drogas y a las mujeres que lo caracterizaban. Cuando en 1986 le diagnostican SIDA, los médicos le pronostican un mes de vida. Es asi que Woodroof comenzó a tomar AZT, el único medicamento disponible para luchar contra la terrible enfermedad en aquella época. 






ACTORES: Matthew McConaughey, Jennifer Garner, Jared Leto.
ACTORES SECUNDARIOS: Steve Zahn, Kevin Rankin, Michael O'Neill.
DIRECTOR: Jean-Marc Vallée .
FOTOGRAFIA: Yves Bélanger.
GUION: Melisa Wallack, Craig Borten.
ORIGEN: Estados Unidos.









Vivir Al Límite


Ante la inminencia de la entrega de los premios Oscars (se entregan este domingo), me alegró encontrarme, en  un par de las películas nominadas, dos situaciones que no suelen verse muy seguido para mi gusto, y esto es, que dos actores mediocres o del montón, teniendo en cuenta la mayoría de sus trabajos, hayan conseguido un papel consagratorio. Pero no del tipo como anuncian los diarios titulando: “¡La mejor actuación de su carrera!” (Cada vez que leo este titular me digo: “Siempre ese actor o actriz actuó tres puntos. Así que ahora debe haber tenido una actuación de cuatro puntos. El titular no miente. Es la mejor actuación de su carrera, pero muy lejos del diez.”); sino que realmente lograron actuaciones descollantes. El primer caso es Sandra Bullock en “Gravity”, en un papel que le creí absolutamente todo y el segundo es la actuación de Matthew McConaughey, en la película que hoy nos convoca: Dallas Buyers Club.

No suelo referirme o encarar una crítica desde el lado de los actores, ya que estos reciben órdenes del director. Suelo observar los distintos trabajos desde la mirada del que encara el proyecto antes de quien recibe esas órdenes. Si mi referencia va hacia los actores es para comentar el desastre que hicieron o, como en este caso, para aquellos que resaltan una realización por su trabajo. Y no debo dejar de mencionar la actuación de Jared Leto (fundador además de la banda de rock alternativo adolescente, 30 Seconds To Mars). Si Matthew McConaughey tiene una actuación de nueve puntos, lo de Jared Leto llega al diez y le sobra.

La historia nos cuenta la historia real de Ron Woodroof un hombre texano, flaco al extremo (dicen que las transformaciones físicas extremas hacen que lleguen las premiaciones), ignorante por demás, homofóbico al extremo, adicto a las drogas y al alcohol en exceso, quien al llegar por una eventualidad a un hospital, es informado por los médicos que lo asisten, que posee el virus del sida y que le quedan treinta días de vida. En su ignorancia extrema, descree que él pueda ser un portador del virus ya que, según sus palabras: “Eso es una enfermedad de maricones y yo no soy ningún maricón”. A todas luces, un cuadrado homofóbico a viva voz. A partir de ahí empieza a investigar sobre las posibles formas de cura como recurso desesperado, y al empezar a ser tratado con AZT, su condición no mejora. Distintas circunstancias lo llevan a México, donde encuentra un galeno que lo empieza a tratar con un complejo vitamínico que lo revitaliza y le extiende su plazo de vida pautado por los médicos que lo vieron inicialmente. Al descubrir que los grandes laboratorios farmacéuticos, no intentan que la gente se cure sino que su mayor anhelo es hacer crecer sus arcas por demás abultadas, nuestro protagonista, ya mejor de salud, decide empezar a importar a Estados Unidos las sustancias no prohibidas pero no habilitadas para la venta, con las cuales él empieza a hacer negocios. De ahí sale el Dallas Buyers Club.

Es de esas películas que uno mira sin sobresaltos, una “historia de vida” que tanto agrada a un determinado sector del público espectador que le encanta ver situaciones reales (tan real como el director lo dicte). No es mala pero tampoco es sobresaliente, se deja ver. A rescatar: Un par de actuaciones descollantes como ya mencioné y solo eso.


Puntuación: 6 Favitos.-

miércoles, 19 de febrero de 2014

La Grande Bellezza

Sinopsis: En Roma, durante el verano, nobles decadentes, políticos, periodistas, actores, artistas e intelectuales tejen una trama de relaciones inconsistentes que se desarrollan en grande palacios y villas. El centro de todas las reuniones es Jep Gambardella, un escritor que está envejeciendo y que decide recolectar sus recuerdos de su apasionada juventud. 






TITULO ORIGINAL: La grande bellezza
ORIGEN: Italia, Francia.
ACTORES: Toni Servillo, Carlo Verdone.
ACTORES SECUNDARIOS: Sabrina Ferilli, Carlo Buccirosso, Iaia Forte, Pamela Villoresi.
DIRECTOR: Pablo Sorrentino.
FOTOGRAFIA: Luca Bigazzi.
GUION: Pablo Sorrentino.
MúSICA: Lele Marchitelli.
GENERO: Drama, Comedia.
DURACION: 142 Minutos











Juventud Divino Tesoro


La negación es un síntoma poderoso para quien no quiere ver. Cualquier circunstancia que deje en evidencia que lo que se niega: existe, a pesar de ese ocultamiento mental, hará que dicho suceso se presente como algo extraño;  como un evento imaginario que está circunscripto dentro de una realidad paralela. Jep Gambardella niega su pérdida de juventud y por eso le resulta extraño cada cruce casual con jóvenes y niños. El choque con la realidad de encontrarse al fin con que la niñez y la juventud son momentos del tiempo ya vividos, hará que esa negación se transforme en un cuestionamiento casi infantil de sucesos adolescentes que lo llevaron a negar su propio paso del tiempo. 

Jep Gambardella es un escritor que escribió un solo libro en su vida, el cual, lo consagró como literato destacado aunque nunca volvió a escribir. Su elección durante toda su vida fue la de disfrutar y vivir para ese disfrute. Jep cumple 65 años. Una vida entera dedicada a ir de fiesta en fiesta, rodeado de sus amigos de juventud acomodada que van envejeciendo con él y también transitando este disloque snob. La visión adolescente de este grupo de sesentones hace que resulten patéticos en sus movimientos achacosos en las distintas fiestas nocturnas en que participan. En una Roma que resalta los sentidos de cualquier persona pero potenciada por el agrado particular de nuestro protagonista, quien elije ese lugar como su zona de pertenencia, aunque estas pertenencias y amistades empiecen a ir alejándose de este lugar de encuentro casi casual, para partir en sus propias búsquedas interiores (aunque tal vez tardías).  Al llegar a esta edad, se encuentra replanteando su estilo de vida y sus elecciones. No con arrepentimiento, sino con la mirada de quien siente que, con demora, se perdió de vivir cosas distintas (por dolor o por elección). 

Esa existencia superficial no es algo que pese, sino que lleva a realizar preguntas que tal vez no quieran contestarse. Se siente como una elección de transición. Se parte de un lugar y se llega a otro. Toda vida tiene el mismo recorrido, y aunque Jeppino sabe que no quiere escribir más, no puede alejar su forma de ver distintas realidades con el halo de la escritura latente en su yo interno que lo acompañará por siempre. 

Aquellos quienes esperan la construcción de una historia con un principio, un desarrollo y un final; estarán durante largos períodos con cara de signo de pregunta, intentando descubrir que es lo que están viendo sin entender casi nada y odiando cada treinta segundos haber elegido esta realización tan italiana hasta las medias. Es precisamente por eso sencillamente que esta película no es para todos. Aquellos que quieran descubrir una belleza magnética que hace casi imposible despegar los ojos de la pantalla (cada color aparece vívido hasta la explosión y el manejo de sombras y luces es sublime) y escenas que parecen salidas de ese lugar donde la imaginación nos lleva cuando leemos un libro de Cortázar (la escena del velorio es gloriosa y habría que enmarcarla y enseñarla en todas las escuelas de cine) o García Márquez (una jirafa apareciendo y desapareciendo parece salido de “Cien Años de Soledad”), hará que nos sintamos regocijados a la hora de irnos del cine. Los demás, quienes esperan una historia donde todo resulte explicado sin dejar lugar a la imaginación, ni siquiera caminen por la vereda donde estén proyectando esta película. La pasarán muy mal. Los demás: A disfrutar.


Puntuación: 8 Favitos.-

martes, 18 de febrero de 2014

Nebraska

Sinopsis: Del director de Los descendientes. Un padre ya entrado en años realiza un viaje desde Montana a Nebraska con su hijo, a quién apenas conoce, con el fin de reclamar el boleto ganador de un premio millonario.






TITULO ORIGINAL: Nebraska
ORIGEN: Estados Unidos.
ACTORES: Bruce Dern, Will Forte.
ACTORES SECUNDARIOS: Stacy Keach, Bob Odenkirk, June Squibb.
DIRECTOR: Alexander Payne.
FOTOGRAFIA: Phedon Papamichael.
GUION: Bob Nelson.
MúSICA: Mark Orton.
GENERO: Nominada al Oscar, Drama, Aventuras.
DURACION: 115 Minutos











Caminante no hay caminos.



¿A cuántos de nosotros nos han llegado mails con ofertas diversas del tipo: Ofrecimientos de viajes paradisíacos por dos pesos, alargarnos el pene para usarlo como nudo de la corbata, ayudar a nenitos de distintos países con enfermedades rarísimas, contribuir con que el planeta no se prenda fuego donando unas sucias monedas capitalistas y hacernos millonarios a cambio de nuestra contraseña de la tarjeta de crédito? Por más que estos mensajes son cada vez mejor elaborados, todos sabemos muy bien (o casi todos, quiero suponer) que esto es una estafa a todas luces para cazar algún bobo sin despabilarse o algún viejito que se asusta cuando oprime la tecla “Enter”. Estas tácticas aquí son bien desarrolladas a través del correo electrónico y no tan difundido este engaño realizado por el correo tradicional. Aquí de hecho ya nadie manda cartas. Pero en Estados Unidos, es una práctica común seguir enviando propagandas y cupones a través del servicio puerta a puerta. Esta es una historia que parte desde el supuesto engaño a un anciano, quien pugna por cobrar su millón de dólares de regalo, tal como lo dictamina el anuncio que lo confirma como acreedor de semejante premio. Saber si esto es verdad o no, se descubrirá viendo nuestra propuesta del día de hoy.

Construir este tipo de películas donde la búsqueda se transforma en un encuentro, suele tener su lado tierno para el espectador que se transforma en cómplice instantáneo desde el mismo tráiler, aunque al comenzar a vislumbrar la trama no se esté ante un descubrimiento florido y lleno de situaciones agradables (del tipo Disney) sino muy por el contrario. El hecho de filmarlo en blanco y negro hace que resalte lo gris de la vida de todos. Padres, hijos y demás parientes que irán apareciendo a lo largo de relato quedarán expuestos en la chatura de sus vidas. De hecho esa combinación del manejo de grises desde lo visual, resalta el poco brillo en la existencia de todos los que se cruzan y creen a pie juntillas que nuestro futuro millonario llegará para aportarles color a la vida de todos los que alguna vez estuvieron involucrados con su historia, y donde dicho color surgirá con el descubrimiento por parte del hijo de cómo fue la vida de su padre que él jamás conoció ni imaginó. La construcción de ese ensamble entre padre anciano que no escucha razones – hijo queriendo acercarse a su padre eternamente ausente; hará que dicho éxodo se torne para el retoño entrado en años, en la excusa perfecta para tener tal vez una última oportunidad para acercarse a ese progenitor hosco. En esa edad donde los hijos pasan a ser padres de sus propios padres, Ese conocimiento tardío es lo que alimenta la trama. 

Historia chiquita, bien llevada pero muy lejos de aparecer como una de las mejores películas del año, tierna por partes, densa por otras, aunque el resultado final resulte ameno. Historia de descubrimiento y lazos tardíos que apunta al corazón de quien se conmueve con poco. Todo es correcto pero mínimo. Cumple sin excederse y sin tomar riesgos. De acuerdo a esa medianía saldremos del cine con una sonrisa, pero sin llegar a dejarnos ese fuego que aportan las grandes historias. Esta no lo es.

  Puntuación: 6 Favitos.-







viernes, 14 de febrero de 2014

Philomena

Sinopsis: Philomena Lee, una mujer irlandesa en sus 70 años, se embarazó de adolescente en 1952. Su familia la abandonó por vergüenza y la mandó a un convento. Cuando sólo tenía tres años, su hijo Anthony fue alejado del convento contra su voluntad, las monjas habían acordado darlo en adopción a una familia americana. Philomena pasó los siguientes 50 años tratando de localizarlo. A través de una serie de circunstancias afortunadas, ella conoce a Martin Sixsmith, un ex agente extranjero de la BBC y del Gobierno británico. Cuando Philomena le cuenta a él de su búsqueda, Martin se las arregla para que los dos viajen a Estados Unidos y descubran qué sucedió con Anthony. 





Interpretes: Anna Maxwell Martin, Judi Dench, Michelle Fairley, Peter Hermann, Sophie Kennedy Clark, Steve Coogan
Director: Stephen Frears
Guionista: Jeff Pope, Steve Coogan
Director de fotografía: Robbie Ryan
Música: Alexandre Desplat
Montaje: Valerio Bonelli







  
Quien busca, ¿Encuentra?


No sé porqué ni de qué manera asocié, mientras miraba este filme, dos cosas bien distintas pero que me ayudaran a dar mi opinión que ahora están leyendo: La película “Philadelphia” (Jonathan Demme, 1993, ganadora de dos Oscars a mejor actor para Tom Hanks y canción para Bruce Springsteen; aunque para mí la película es un pelotazo) y con las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo.
Voy a dar mi explicación de la primera equiparación que acabo de formular: Siempre creí que una historia puede ser fuerte o conmovedora por sí misma, y que existen directores que elijen contarla de una manera natural, esperando que el mismo relato de hechos conmueva al espectador. Y están aquellos otros que elijen ponerle aditivos (primeros planos con gestos de tristeza que explotan en el rostro, musiquita sensiblera plagada de violines que apuntan derechito al lagrimal) para que la gente sensible llore un mar y medio en la butaca del cine. Yo siempre elijo a los primeros. Los segundos me resultan bastante cursis. En este caso tomaré como ejemplo, si recordamos, la escena final de Philadelphia, en donde nos muestran en el velorio del protagonista, un video de éste cuando era chiquito y se apartaba quedando solo en una larguísima toma con música que intentaba destrozarnos el alma y hacernos sufrir a destajo. Aquí teniendo la posibilidad de hacer algo similar, el director (Sthepen Frears a quien amamos desde “High Fidelity”) decide mostrar algo parecido pero sin los aditivos antes mencionados, dejando que el espectador vea la pantalla sin la necesidad de golpes bajos. Ésta película tiene varios aciertos de este tipo. Mostrar sin pegar es realmente un buen manejo del tacto. 

El segundo punto es la para mi admirable e incansable búsqueda que realizan las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo por recuperar a sus hijos y nietos desaparecidos. Son realmente admirables las fuerzas y pelotas que tuvieron que tener estas mujeres, para buscar a aquellos seres queridos que les fueron arrebatados de sus brazos por la fuerza. La necesidad ulterior de conectarse con su sangre es el motor que moviliza a estas grandes personas. Y está película se trata de alguien que tuvo una historia similar. La pérdida de un hijo arrebatado de los brazos de una madre y la necesidad de búsqueda, 50 años después, de este lazo que el tiempo no logró romper. Las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo buscan a sus hijos. Philomena también. 

Judi Dench en el papel de Philomena no merece nada más que loas nuevamente por su trabajo. Es admirable como pueda intercambiar roles en cuestión de segundos desde firmeza sin beligerancia hasta pasividad empática. Acompañada por un periodista que la ayuda en su búsqueda veremos a Steve Coogan, un inglés adorable que tiene por estampa en casi todos sus trabajos, un humor sarcástico y comentarios ácidos que parecen brotarle de manera natural (Se luce en “24 Hour Party People”; si quieren entender que fue y como se desencadenó el rock inglés de los años ochenta, no tienen que dejar de verla). Entre ellos no hay una afinidad que destaque en escena pero dicha distancia resulta efectiva a la hora de contar esta historia.  

Es una buena película que no nos quedará en mente por mucho tiempo, al momento de elegirla no resultará una mala elección, aunque al salir del cine ya la hayan olvidado. 


Puntuación: 6 Favitos.-